- Año: 2010
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Fotografías: Patrick Reynolds
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Se dedica a cuidar un área de bosque nativo en la región, donde las plantas autóctonas y animales puedan vivir en la naturaleza sin la amenaza de plagas introducidas. Se ha establecido una isla de protección con un santuario, al norte de la ciudad de Dunedin.
El cliente pidió un edificio que siguiera la línea de las típicas construcciones de Nueva Zelanda, para no impactar demasiado en el paisaje. El centro de visitantes intenta interpretar su lugar de emplazamiento y el descubrimiento del paisaje como un depósito único de la flora, la fauna y la historia de la población local.
Al igual que en todos los paisajes del país, el microclima no solamente define los tipos de suelos, plantas y animales, sino también la forma de vivir y construir de sus habitantes.
El edificio propuesto se encuentra en las laderas superiores de Mopanui y Mihiwaka. El clima de la zona es mayormente nublado y su vegetación se describe como un "bosque nuboso", con fuertes vientos, nieve y hielo en invierno. En verano, el clima se caracteriza por sus sequías.
El diseño y la construcción del centro de visitantes es un intento de responder a estas condiciones y a las necesidades de los usuarios. Interiormente incluye salas de clases, servicios para los visitantes, tiendas, oficinas y un gran atrio central.
El proyecto se configura en base a grandes ventanales con vistas hacia el paisaje, protegidos por pantallas solares de madera que lo integran de mejor manera al paisaje natural.